Hace pocos días tuve la suerte de poder visitar la plataforma logística de la empresa DIA situada en Arroyomolinos (Madrid). Nunca había visitado una y quedé gratamente sorprendido. La primera imagen de la visita, desde una pasarela situada en altura, es sencillamente espectacular. El movimiento de mercancía a ritmo vertiginoso y la precisión con la que se transportan los productos en las diferentes carretillas dentro de la plataforma, recuerda a una coreografía perfectamente sincronizada como si de un espectáculo de El Circo del Sol se tratara.

La plataforma de DIA en Arroyomolinos es una de las 18 que la empresa tiene en España, y cuenta con 19.000 m2 de superficie y presta servicio a diario a las casi 200 tiendas situadas en la parte oeste de la Comunidad de Madrid, así como zonas de Ávila, Segovia y Toledo. Trabajan aproximadamente 200 personas, las cuales gestionan alrededor de 3000 referencias distintas de las que 1700 son de alta rotación (el 95% de los bultos) provenientes de un número incalculable de proveedores con los que el departamento de compras trabaja constantemente. Los pedidos que se envían a las tiendas son diarios en la mayoría de los casos. Sólo en pocas tiendas con menos rotación se envían pedidos cada dos días. El nivel de sincronización es muy alto para conseguir buenos niveles de eficiencia y productividad.

La plataforma cuenta también con un laboratorio de control de calidad que realiza análisis periódicos, sobre todo de productos de marca propia. Destaca igualmente el uso de picking por voz (Voice Picking), una tecnología de reconocimiento vocal a través del cual el operario transmite las órdenes mediante la voz a un terminal informático en la preparación de pedidos. Este punto clave de la distribución agroalimentaria es muy poco conocido por parte de los consumidores. En mi opinión, estas instalaciones deberían abrirse con más frecuencia para que los clientes valoraran en mayor medida el trabajo que hay detrás de ese producto que encontramos permanentemente en el lineal de nuestro supermercado.

El pasado 17 de abril, coincidiendo con el día mundial de la lucha campesina (aunque creo que fue pura casualidad), el pleno del Observatorio de Precios de los Alimentos del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente donde están representados todos los agentes y entidades de la cadena agroalimentaria española, aprobó una lista de 12 recomendaciones para un mayor desarrollo de los canales cortos de comercialización de productos agroalimentarios en base a un estudio sobre el funcionamiento de estos canales encargado por dicho Ministerio y realizado durante 2012. En este post, me limito a compartir dichas recomendaciones, dada la importancia y trascendencia que pueden tener estos canales para muchos agricultores y ganaderos de nuestro país, que han hecho de este canal su modelo de negocio agroalimentario. 

Información estadística 

1. Diseñar e implementar algún tipo de operación o registro estadístico, o aprovechar los existentes, para mejorar el conocimiento de este tipo de canales y permitir el seguimiento de su evolución y la evaluación de las medidas puestas en marcha. 

Legislación y normativa 

2. Adaptación de la normativa europea que permite la flexibilización de los requerimientos sanitarios en atención a las necesidades específicas de cada modelo de negocio, no implicando pérdida de garantías para el consumidor sino adaptación de los requerimientos estructurales y burocráticos a la dimensión de los operadores. 

3. Combatir, por parte de las autoridades locales competentes, el intrusismo en los mercados de productores, entendiendo como tales, aquellos donde de forma estricta todos los vendedores son productores. 

4. En el caso de los llamados “mercadillos”, donde pueden coexistir tanto productores como otros vendedores ambulantes, la propuesta puede ir encaminada a diferenciar e identificar al productor local. 

Logística 

5. Salvar el problema de la dispersión de productores y consumidores intentando concentrar la oferta y el consumo. 

6. Fomentar el establecimiento de redes de productores y de consumidores que garanticen una producción comercializada suficiente para rentabilizar las operaciones logísticas. 

7. Favorecer el establecimiento de puntos de entrega en los núcleos urbanos con amplios horarios de apertura para facilitar al consumidor recoger sus pedidos. 

8. Promover investigación en micro-logística adaptada a las características de este mercado. 

Marketing 

9. Trabajar la presencia en redes sociales, que constituyen una herramienta económica y no excesivamente complicada para los no expertos. 

10. Apostar por el desarrollo de sitios web o aplicaciones adaptadas a dispositivos móviles. 

Promoción y ayudas 

11. Mejorar el conocimiento y difusión de los mismos entre los consumidores, para construir y consolidar una cultura de “lo local”, aún incipiente en España y que en otros países ya es un hecho. 

Etiquetado específico 

12. Estudiar para cada situación y caso particular las distintas opciones y las fórmulas ya empleadas con éxito, cuidando mucho que las soluciones implantadas no supongan nuevas barreras para los operadores y garantizando el derecho de información a los consumidores.